domingo, 21 de octubre de 2007

CINE NACIONAL

Por Karen Arredondo

Este espacio tiene como finalidad recordar el cine chileno de antaño y darle valor a una de las películas más importante del cine local. Sin menospreciar las actuales producciones, es necesario detenernos en esta obra que refleja parte trascendental de nuestra historia como país

La película que elegí esta vez es bastante simple, narra la historia de un campesino de una localidad cercana a Chillán, quien alcoholizado asesina brutalmente a una mujer y a sus cinco hijos. ¿Saben de qué film les hablo? El Chacal de Nahueltoro.

El trabajo que realiza Miguel Littin, director de esta película ambientada y creada en los años 60, es relatar la vida de un afuerino llamado José, quien va de un lugar a otro buscado trabajo esporádico. La película se inicia con la detención del hombre por el delito cometido, su interrogatorio con el juez de la causa sirve para enlazar sucesos de su infancia, una cruda realidad que será clave en el desenlace de la obra. Este film no queda ajeno al el devenir de la época, por este motivo es importante su análisis.

La vagancia por el campo y el alcohol es el fiel reflejo de lo que pasaba en los campos chilenos de los años 60’. Ya como adulto, José es marginado socialmente, en este escenario conoce y se une a Rosa Rivas una mujer que carga con cinco hijos.

Lo particular de este rodaje es que se utilizaron las locaciones reales en las que ocurrieron los hechos (el lugar del crimen, la celda, etc.) y todos los textos que se escuchan en la película son oficiales, entre ellos, el expediente de la causa judicial y entrevistas de prensa al asesino.

Lo más característico de esta obra, y lo que según mi parecer busca el director, es mostrar la cruda infancia que tuvo José, el vagar por los campo, y ya como adulto el sufrimiento de la soledad ahogado en los vasos del alcohol. Más adelante Littin muestra el arrepentimiento y los cambios sustanciales que conciernen al personaje.

Después de asesinar a la mujer y los hijos de esta el hombre es capturado, ya en la cárcel el reo es acogido por los otros presos, y mientras se prolonga su juicio José aprende a leer y escribir, se vuelve católico y va a misa.

Después de ver los cambios favorables del sujeto, uno como espectador espera que el desenlace sea otro, que el crimen sea absuelto por el Presidente de la República. Pero en el tramo final el asesino es condenado a muerte y fusilado.

Littin busca subrayar su tesis acerca de la hipocresía de un sistema judicial que castiga con la muerte a un asesino arrepentido que ha llegado a ser otro hombre.

Esta es una película que aunque la veas 10 veces te sigue gustando. Se las recomiendo a aquellos que no han tenido la posibilidad de verla y para aquellos que si, los invito a comentarla. Porque nunca esta demás hablar sobre el cine nacional...

1 comentario:

nn dijo...

El Chacal de Nahueltoro es la obra maestra del cine chileno...!!!
gran articulo...